Los juegos de Austin Powers para Game Boy Color, como Oh, Behave!, son una mezcla confusa de minijuegos, aplicaciones y un juego de plataformas básico, empaquetados en una interfaz que simula una computadora de los años 60.
Aunque visualmente temática, esta interfaz resulta más frustrante que funcional, dificultando encontrar el contenido principal y ralentizando la experiencia con tiempos de carga innecesarios.
En el escritorio virtual, las aplicaciones como Shagulator (una calculadora) o Austin’s Pad (un procesador de textos rudimentario) añaden funcionalidad limitada, con características como impresión de mensajes que rara vez funcionan correctamente.
Otra de las singularidades de este juego es su «navegador de Internet», uno que solo ofrece datos sobre las películas de Austin Powers y no es por ser quisquilloso, pero hubiera venido bien datos extra Random para hacer esto más inmersivo.
Y finalmente, Aunque algunas funciones, como la compatibilidad con la impresora Game Boy, parecen interesantes, su implementación es bastante torpe.
En general, el cartucho ofrece contenido mediocre, siendo difícil justificar su compra. Ahora que, si lo consigues gratis, puede servir para pasar el tiempo, pero no esperes una experiencia divertida o innovadora.
Calificación: 35/100
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